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L’ENDEVÍ «DONT GO BACK» ART GATES RECORDS

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Lo primero, pedir disculpas al grupo por el retraso en esta critica, el volumen de trabajo nos desborda, y aunque eso sea bueno en parte, para esto no lo sea tanto.

L’ENDEVÍ es un grupo que tiene a sus espaldas un largo recorrido: comienza su historia en el remoto año 2007 grabando su primera demo en septiembre, 2007 de la mano de Mamen, pilar de las partes líricas y Jaume en la guitarra cerrando la formación al añadir tres músicos, con los cuales tenían una gran amistad: Mario en la batería, «Pater» en la guitarra y Guillermo “Tama” en la parte rítmica  del bajo.

A posteriori publicarían su primer álbum el cual salió a la venta en enero de 2010 titulado “When I Desire Something You Can’t Do Anything». En este «Dont go back» tenemos novedades en su formación, debido a la salida de Pater y Mamen que decidieron dejar L’Endeví por motivos personales, y propiciando la entrada de Pedro Bataller a la guitarra y a Lorena Gascón en las voces.

No puedo hacer con este disco un contraste detallado con respecto a sus anteriores trabajos, debido a que no conocía al grupo, pero tengo claro, al respecto, varias cosas:

La primera es que estamos delante de un grupo que ha sacado un disco distinto, con unas composiciones mesuradas y de peso, y que, para mi gusto, transciende la etiqueta del metal, engalanando su sonido con elegancia sobria y trazas compositivas mesuradas y perfectamente estructuradas. Todo el disco en general guarda una cierta atmósfera lacónica y levemente dramática, y el buen gusto se plasma en cada canción.

El primer tema «Deja Vu» ya es una declaración de intenciones, donde un rasgado juego melódico acotado en trinidad, a saber, voz, teclado y guitarras acústicas o eléctricas, muestran la enorme sensibilidad del grupo. A renglón seguido tenemos «Sleeping in the cage» una canción mas dura, con dos voces contrapuestas en las líricas y unos tiempos meticulosos, duros, pero no exentos de cierta alma funk.

Proseguimos con «Mirror» totalmente distinta a la anterior; en el sentimiento global del tema, Lorena imprime un abanico de sensaciones abiertas, aperturando su rango vocal, levemente arenoso y sin dificultad en escalar octavas, generando un perfecto teatro para que el grupo juegue con las sensaciones y las atmósferas.

«Phoenix» es la constatación del buen gusto del grupo, y de la visión diáfana de la musicalidad que el grupo imprime en sus canciones: comienza, Lorena altiva rodeada de un labrado juego de acústicas, para desembocar en un tema doliente, electrizado, y duro, muy marcado por el sonido del bajo, y la incorporación de un coro gutural en segundo plano. No se exactamente el porqué, pero tiene un magnetismo especial este tema a pesar de su oscuridad innata.

«Needle» es una canción que por estructura compositiva me recuerda a grupos como Guano Apes, toda un referencia sin duda. La tonalidad de Lorena se endurece al compas de la guitarra, la linea rítmica se acusa mucho mas, y como es norma de la casa, el tema rezuma un aire lacónico.

«Sin miedo» se aparta del trabajo en inglés para abrirse al castellano: No se si es por el uso del castellano como idioma vehicular, pero en este tema se aprecia perfectamente el alma herida que compositivamente nos muestra L’ENDEVÍ por que las líricas son toda una oda dramática, perfectamente mecidas por la voz de Lorena, que en esta pequeña sinfonía se rodea de unos arreglos sinfónicos que enaltecen su trabajo, y sobre el que el grupo articula su sonido, preponderando el sonido de guitarra y el de las rítmicas de la batería. Un tema para dejarte al borde de la lagrima de emoción y la piel de gallina.

«Split» vuelve otra vez al inglés, en una canción que guarda un inteligente juego en los tiempos, y un estribillo de guitarra y bajo magnético. El uso de los coros contrapuestos de Lorena junto a los guturales dan aun mas si cabe, peso, a este denso tema.

«Ishi» es una balada de doble alma, acústica y racial hasta su ecuador, que se electrifica hacia su final, sin perder de vista que es una balada, curiosamente, una de las mas luminosas del disco. Muy buen trabajo del grupo en general en la ejecución de las armonías encadenadas de las acústicas junto a la eléctrica, pero donde brilla de forma especial el enorme trabajo de Lorena.

«The flight of the fly», gracias a ese sonido constante del bajo, nos da un sonido tribal y salvaje, con ese toque levemente funk, pero inherentemente metálico: volvemos a las dobles voces, solo que aquí el peso de las parte guturales ganan fuerza e imprimen un sonido denso y salvaje en este tema mostrando la versatilidad de las partes líricas.

Los últimos temas del disco son Deja Vu, Fénix y Peligro versiones en castellano de sus temas homónimos, y que se agradecen para saborear mejor el trabajo del grupo en la lengua de Cervantes.

Mi veredicto sobre este trabajo, es que es un trabajo que a sus espaldas tienen muchas horas de trabajo, y que no es un disco para saborearlo a la primera, ya que la riqueza de matices que guarda le hace justicia una oida diversificada para poder sacar todo el gusto a este meritorio trabajo, y que para mi gusto, gana mucho mas en castellano, aunque le reste proyección internacional.

 

JOSEAN ZOMBIE.

 

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