Concierto acústico de Miguel Oñate el Sábado 26 de Enero 2013 en el Bar El Tapeo (Madrid).
Texto: Trasgu Rock
Fotografias: Teresa Sánchez Palomo
El pasado sábado dia 26 de Enero, tuvo lugar en el bar el Tapeo del Paseo de Extremadura 140 (Madrid), dos actividades organizadas por un servidory por el personal del bar el Tapeo, por la mañana concretamente al mediodia a eso de las 13:00 horas, tuvo lugar la sexta edición de «La Hora del Vermut Rock» en la que contábamos para la ocasión con la presencia de los madrileños Cuatro Gatos, con los cuales pasamos un estupendo rato, durante el cual nos deleitaron con tres temas en acústico y del cual ya se ha dado cuenta desde Zombie War Management-
El segundo evento, programado para este mismo dia en el mismo local, era un concierto acústico a cargo del maestro Miguel Oñate, acto que estaba programado para las 21:00 horas. Ambos eventos estaban programados como colofón final antes del cierre definitivo del Bar, que se produjo al dia siguiente y en el que he tenido el placer de programar «La hora del vermut rock» por donde han pasado las siguientes bandas: Arkania, Leyenda, Beethoven r., Oker, Under Proud y en la última edición como ya he comentado Cuatro Gatos. En este mismo local también realizamos la entrega de «Juguetes del rock» en el que participarón un utrido grupo de músicos y representantes de varias bandas, a esto añadimos la programación del concierto de Miguel Oñate este pasado Sábado, que es el motivo que centra esta crónica.
Sin apenas tiempo para descansar y una vez finalizado «La hora del vermut rock», solo me pude permitir un ligero descanso y cambio de ropa, me vuelvo a dirigir al tapeo a eso de las 21:00 horas, salvo el personal del bar, y la presencia de un borrachin conocido del barrio que estaba ahogando como de costumbre sus penas en la barra frente a una copa, no había nadie más.
Como comenté unas líneas más arriba, el concierto de Oñate estaba programado a partir de las 21:30 horas, tras una mirada de expectación que me lanzó josé Jr. uno de los responsables del local, mirada que le devolví de confianza y de tranquilidad señalándole que no pasaba nada, que todo iba a ir bien, fue a partir de las 21:15 horas cuando comenzarón a llegar los primeros asistentes. desde el exterior del bar y a través de sus cristaleras muchos miraban sonrientes, sabiendo que cogerian un sitio privilegiado incluso se aseguraban un asiento, para presenciar lo que a priori sería un concierto memorable, como así se confirmó hasta el final.
Pocos minutos después de la hora programada, llegan el maestro Oñate y el guitarrista que lo acompaña habitualmente Javier Bermejo, iniciando los preparativos para su actuación, en la zona habilitada como escenario solo había dos banquetas preparadas, nada más, me dirijo hacia esa zona donde se están preparando para presentar a los protagonistas, mientras me acercó, miro hacía atrás, comprobando que el local comienza a llenarse, cada vez hay más y más gente.
Después de hacer público mi agradecimiento a la gente del Tapeo por el apoyo incondicional ofrecido a las iniciativas que he podido poner en marcha gracias a ellos, me apresto a realizar la presentación del maestro y de Javier Bermejo, a los cuales les recibe el público con un unánime y gran aplauso.
Pasadas las 22:00 horas unos pocos minutos, comienzan a sonar las primeras notas y acordes de la guitarra acústica de Javier Bermejo, se produce en la sala casi un silencio absoluto, se siente en el ambiente una gran expectación y ganas de escuchar la voz de Oñate.
Sin micrófono a capela como los grandes y él lo es, comienza a interpretar el tema «How Wonderful You Are» del bajista, compositor y vocalista Gordon Haskell, arrancando a la terminación de dicho tema la primera gran ovación de la noche, con este tema ya tenía ganado al público que en ese momento ya llenaba la sala, la entrada al bar y la acera (bloqueda por la gente) y que se encontraba mucho más a la expectativa por lo que podía venir a continuación.
El segundo tema interpretado fue el titulado «La Torre de papel», al que le siguieron «A medias» y la versión del tema «Change The World» de Eric Clapton, tras el cual y como anécdota, el maestro comentó al respetable: «He pensado que si echamos un cigarrito de cinco minutos» y asi´lo hicimos, como buenos chicos y chicas que obedecen a su maestro. De regreso nos versionearon el tema «El Golpe» con la música de la pelicula de cine dirigida por George Roy Hill en 1973.
A estas alturas del concierto ya quedaron más que patentes, las elegantes formas y particular estilo de estar sobre las tablas, transmitiendo al público un sentimiento de admiración y de gratitud mutuo, nos demostró el buen estado en que se encuentra su voz potente y muy personal de un Miguel Oñate que nos dejó enganchados desde el principio, yo que estuve muy cerca de él, me di cuenta perfectamente de como controla la voz, como maneja subidas y bajadas cuando el tema lo requería, por algo es un maestro.
Sigue acercándose gente al Tapeo, mucha gente se tiene que quedar fuera, de vez en cuando entre el público se oye un «dejar sitio», el concierto continua con los temas «Guiándome» al que le siguió una versión del «Can´t Find My Way Home» que interpretaba la banda de blues rock inglesa Blind Faith, Oñate sabe perfectamente como hacer su trabajo, es la diferencia del profesional con mucho además recorrido del que no lo es, todos estábamos disfrutando, el sudor se deja caer por su cara y por los rizos de su cabello, se seca con su toalla y continúa el espectáculo, perfectamente acompañado de Javier un gran guitarrista como asi lo demostró empuñando en esta ocasión su acústica.
A este tema le siguieron «La llave», «Un sobre Rosa» «Esa Camarera» «Crisis» y el «Bar de Katy», ovaciones y vitores por todo lo alto en cada tema, lo que obligó a Miguel Oñate y a Javier a interpretar tras la petición del público tres temas más, de los cuales, pudimos gozar con la versión de un tema de Whitesnake titulado «Sailnig Shisps»con un perfecto sonido de las guitarras acústicas de ambos, le siguió como segundo bis el tema «Something» de The Beatles y cerraron con el tema titulado «El Astuto».
En definitiva, disfrutamos en grande con el concierto, un concierto con un aforo pequeño como en muchos bares se hacía en otras épocas, escuchando buen blues, buen rock, en definitiva buena música, rodeados de amigos y amigas, regado todo con unas buenas cervezas bien fresquitas. Una gozada.
